El alto volumen. Cuando uno entra a la Iglesia y esta el Servicio en todo lo que da, uno no puede mas que apretar los dientes y taparse los oidos al percibir el alto volumen de la alabanza. Aparte del volumen hay una falta de ecualizacion. Los instrumentos estan desbalanceados. Los agudos estan muy fuertes y se puede ver mas entusiasmo que calidad. Ceo que el entusiasmo es importante y la libertad de alabar es hermosa, pero el salmista nos dice que debemos adorar a Dios con inteligencia. El rey David tenía cantores y tañedores entrenados y dedicados a eso. Eran expertos músicos y de edad madura, me imagino personas que fueron probadas y que su edad les permitía comprender la magnitud de la responsabilidad de guiar al pueblo en alabanza y meterlos a la presencia de Dios. Despues de todo ¿no es esa la labor del levita? ¿acercar el pueblo a Dios? ¿
Como podriamos mejorar este problema? Bueno creo que poniendo a las personas adecuadas y preparadas a ecualizar y balancear bien la musica. Los lideres de la alabanza deben de aceptar consejo y critica constructiva para mejorar y quitar este gran problema que afecta la salud y mas que nada la salud espiritual. Si tienes un comentario o reaccion a este articulo escribe a mpolo56@yahoo.com